En Puerto Rico el peligro de un tsunami es real. Desde 1867, dos tsunamis han afectado sus costas, produciendo muerte y destrucción en 1867 y 1918. Aunque la fuente de los tsunamis históricos ha sido terremotos locales, también se podría generar por terremotos regionales y distantes, un deslizamiento submarino y con mucho menos probabilidad (en el caso de Puerto Rico) por una erupción volcánica o impacto de un cuerpo celeste. En otras partes del Caribe existe también la amenaza por tsunamis según el catálogo de la National Geophysical Data Center (NGDC). Desde 1996 se ha venido tratando de establecer un Sistema de Alerta de Tsunamis para Puerto Rico y las Islas Vírgenes. En Puerto Rico los esfuerzos se han enmarcado bajo el Programa de Alerta y Mitigación de Tsunamis de la Universidad de Puerto Rico de Mayagüez (UPRM), mientras que los esfuerzos regionales se han coordinado bajo IOCARIBE (cuerpo regional de la la Comisión Oceanográfica Intergubernamental, IOC por sus siglas en inglés, de la UNESCO).
El Programa de Alerta y Mitigación de Tsunamis consiste de seis tareas: 1) preparación de mapas de inundación y desalojo para el archipiélago de Puerto Rico; 2) la educación acerca este "peligro olvidado" en el Caribe (incluyendo videos, simulacros de tsunami, talleres y la instalación de letreros de alerta de tsunami en las playas); 3) monitoreo de datos sísmicos y mareográficos en tiempo real (24 horas al dia-7 días de la semana) para la determinación rápida de los parámetros de terremotos y cambios significativos en el nivel del mar 4) desarrollo de protocolos para la emisión y diseminación de alertas de tsunami para Puerto Rico y las Islas Vírgenes Estadounidenses y Británicas; 5) preparación de un sistema de bases de datos basado en el historial de tsunamis ocurridos en el Atlántico y el Caribe; 6) participación en las reuniones del USA National Tsunami Hazard Mitigation Program.
El Programa de Alerta y Mitigación de Tsunamis consiste de seis tareas: 1) preparación de mapas de inundación y desalojo para el archipiélago de Puerto Rico; 2) la educación acerca este "peligro olvidado" en el Caribe (incluyendo videos, simulacros de tsunami, talleres y la instalación de letreros de alerta de tsunami en las playas); 3) monitoreo de datos sísmicos y mareográficos en tiempo real (24 horas al dia-7 días de la semana) para la determinación rápida de los parámetros de terremotos y cambios significativos en el nivel del mar 4) desarrollo de protocolos para la emisión y diseminación de alertas de tsunami para Puerto Rico y las Islas Vírgenes Estadounidenses y Británicas; 5) preparación de un sistema de bases de datos basado en el historial de tsunamis ocurridos en el Atlántico y el Caribe; 6) participación en las reuniones del USA National Tsunami Hazard Mitigation Program.